La Asociación de Bancos de México (ABM) anunció que, a partir del 1 de julio de 2026, toda persona que desee depositar o retirar efectivo por montos superiores a los 140 mil pesos dentro de sucursales bancarias, estará obligado a presentar una identificación oficial y un dato biométrico para completar dicho trámite.
La nueva disposición forma parte de un esfuerzo del sector financiero hacia el fortalecimiento de la seguridad de sus trámites y prevenir el uso de recursos financieros en actividades ilícitas.
¿Por qué se implementará esta medida?
Según el dirigente de la ABM, Emilio Romano, dicha medida tiene como objetivo prevenir fraudes, el lavado de dinero y el financiamiento a actividades ilícitas, sumado a que quieren incidir hacia una mayor digitalización de la economía mexicana.
Esto va más allá de la regulación y busca no solamente el evitar actividades ilícitas, sino también ayudar a digitalizar la economía y a combatir el excesivo uso de efectivo, que también puede ser utilizado en actividades ilícitas”, añadió Romano.
La decisión cuenta con la aprobación del Comité de Asociaciones de la ABM, por lo que acuerdan adoptar estas primeras recomendaciones con las que se fortalecerá la capacidad de prevención y detección de operaciones sospechosas.
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